La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

Presente imperfecto de indicativo

Fracasar constantemente y sentirse podrida, como esa manzana que no te apetece morder. Esa es la vida que me espera a tu lado: morir a cada instante, morir en cada beso, morir con cada abrazo, morir... estar muerta mientras respiro caricias protervas.
Vivir,, yo deseaba vivir colorear los días a tu lado, subrayar las alegrías, estirar las virtudes y desterrar los defectos.
Era sencillo, te facilité mi manual de instrucciones: no mentir. No necesitaba nada más para estar a tu lado sin sentir este miedo que me ahoga, que me lanza a una batalla contra mí misma que siempre pierdo yo, desganada, derrotada y desmembrada.
Soy un error y una cobarde, siempre lo he sido, incapaz de gestionar determinadas realidades para afrontarlas y que no se conviertan en puñales que se clavan y me desangran por dentro.



No hay comentarios: