La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

Dudas e instantes

Olvidar, dejar de lado el rencor que te producen ciertos recuerdos, para sumar.
Siempre se me ha dado mal "no recordar" determinadas cosas, sobre todo, cuando su perdón me obliga a saltarme mis principios y mí ética.
Pasar por encima de esas heridas para volver a disfrutar de nuevos momentos que, al mismo tiempo, pueden volver a doler.
No sé si quiero.

No hay comentarios: