La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

Esas cosas peculiares de la humanidad

Hace aproximadamente un año me timaron.
No crean que debido a mi codicia, sino a causa de mi inocencia y apelando a mi bondad.
Vamos un hombre me contó una triste historia que le había pasado y le presté dinero para el metro, cenar y alguna cosa más. En cuanto me alejé pensé que me la habían dado con queso, pero me quedó la duda de que pudiera haber sido verdad.
Hasta hoy que iba paseando por la calle y le he visto haciendo la misma a una señora. En ese momento no he sabido qué hacer. La señora le ha dado un euro, luego otra, mientras yo quería enfrentarme a él, pero claro lo mismo no era nada seguro. Luego, mientras hacia de espía con Ismael detrás de él, he llamado a la policía a ver si podían hacer algo pero han sido poco alentadores.
Al final, pues cuando estaba contándole la historia a otra pobre mujer, me he acercado y le he dicho a la señora que no le diera ni un euro porque era la tercera a la que le contaba la historia y a que a mí ya me había contado lo mismo hace un año. El hombre se ha enfrentado un poco a nosotros, pero no ha llegado más lejos. Ojalá hubiera podido hacer algo que vaya a ser más a largo plazo, pero tampoco se me ocurría nada más, tras haber llamado a la policía.
Si a alguien se le ocurre algo, sean recibidas las sugerencias.
La señora luego nos ha dado las gracias, el timador obviamente no.
P.D.: Si me timaron es porque soy una estúpida que en cuanto le cuentan algo se cree la salvadora del mundo y le dar por ayudar tontamente.
P.D.: No tengo problemas en que me sean sinceros y si lo veo razonable, dar dinero. Pero no que me mientan.
P.D.: Aunque no haya solucionado nada, me he quedado bien agusto, porque al menos no me he quedado callada viendo lo que pasaba.
P.D.: Gracias a Ismael que ha estado a mi lado, a pesar de mi locura.

2 comentarios:

Rafael García Librán dijo...

Ha veces tienes esos momentos que son taaaaaaaaaaaaaaan fantásticos.

Y ahora es cuando digo que tengo envidia de Ismael porque vio esos momentos... taaaaaaaaaan fantásticos tuyos
un beso enorme

la punta de mi lengua dijo...

Fantásticos pero que un día me voy a llevar un guantazo.
Un abrazo