La punta de mi lengua: no soy docil, no lo quiero
La punta de mi lengua
Lo dejé marchar y no me arrastró.
Esa mirada que todo lo sabe
Llámame sólo cuando no necesites
nada de mí,
ni siquiera
mi compañía.
Me temo que sólo entonces
podrá acudir mi corazón desnudo.
visto en www.lamiradaoblicua.bitako.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario