La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

Titanes de la algarabia

La música rebozándose por todos los sentidos.
Túrbame cuando encuentres el escote,
el que nunca muestro pero sí desgasto.
Medidas desmedidas para conjugarnos deseados.
Amores bien armados para restaurarse apasionados.

No hay comentarios: