La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

Ahora que Venus está en su máximo esplendor

Gracias por comenzar este otoño conmigo,
por ser luz y calor en este día que arranca con lluvia y en tonos grises.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No sé a quién van dirigidas las gracias, pero si Venus está en su máximo esplendor, Marte tampoco se queda atrás.