La punta de mi lengua: no soy docil, no lo quiero
La punta de mi lengua
Lo dejé marchar y no me arrastró.
Las horas, los dias
Vivo cargando con una sombra,
con un hueco lejano y ausente,
con una sonrisa perseguida y soterrada.
Menos mal que entre tanto dolor me encuentro con lo que quiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario