La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

No fue ayer pero así lo siento

No fue ayer cuando nos despedimos y la tormenta anegó nuestros cuerpos para convertir hasta el prometedor sueño en ruinas y naufragios.
No fue ayer cuando nuestras bocas dejaron de destilar deseo y en tu mirada padecí el destierro.
No fue ayer, pero yo así lo siento.

4 comentarios:

Itzara dijo...

todo tiene su proceso, y el despedirse de alguien a quien se ha querido(o se quiere) es lento..paulatino..es un dia un poco y otro dia otro poquito más..y a veces incluso..no llegas a despedirte nunca del todo.Un besote y animo!

Anónimo dijo...

Hay ciertos sucesos en nuestras vidas que siempre nos parecerá que ocurrieron ayer.

la punta de mi lengua dijo...

¡Gracias por cuidar mi blog el tiempo que yo no puedo encargarme de él!
Un abrazo

ro dijo...

Ay! Qué feo es quien amas no te mire como antes. Y, más feo aún, que pase el tiempo y ese dolor no cese. Ojalá que el ayer se convierta en pasado remoto. Gracias por el estímulo que nos das a Andrea y a mi cada vez que vas por allá. Es muy difícil publicar, pero está bueno que alguien crea que eso sería posible. Besotes