La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

desprendiendo calor

En tus pupilas conocí el miedo,
diciembre, mes invernal.
La tierra tan dura como nuestro cuerpos.
El olvido dispuesto a avanzar.

No dejaré que el pasado recuerde lo que no soy.
Enfriaré esos besos que a veces regresan para mancharme la piel.
Aunque quieras estar,
dejaste de tener fuerza para abrazar
mi torso,
mi espalda,
mi pecho,
mis noches,
mis sueños.
Yo sólo me sacio con abrazos sinceros y valientes,
ahora sólo como de las bocas libres y ardientes.

La vida se disfraza perfecta en este lugar.
...ncio

No hay comentarios: