La punta de mi lengua: no soy docil, no lo quiero
La punta de mi lengua
Lo dejé marchar y no me arrastró.
Oxígenada
Odio saber que te mueves y te vas,
que te quedas y no estás.
Las manecillas cual navajas de afeitar.
Mis mañanas tus heridas,
Mis jadeos tus espinas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario