La punta de mi lengua: no soy docil, no lo quiero
La punta de mi lengua
Lo dejé marchar y no me arrastró.
Arruinados
Medidas desmedidas
para conjugarme en pasado.
Amores desarmados
para restaurarse intoxicado.
Tú,
permanente e indeleble,
tratando de no sonreir en mi boca.
No me persigas,
no es necesario.
Sabes que tropiezo cuando quieras
.
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