La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

Perfumes y esencias

Hoy por fin tras varias semanas sin poder hacer la compra, lo he conseguido (queso, fruta, galletas, leche, pan, etc.)
Y mañana, incluso, antes de mi reunión pueda cortarme el pelo (si no lo hago es por dormir un poco más que nunca viene mal).
Dos meses sólo ya para acabar el C.A.P.

El jueves desaparezco para escuchar la calma y el silencio que me regalan los pueblos. Veré a un chico relindo de ojazos azules y timidez contenida. ¡Y patinaré!

SI va todo bien, espero que así sea, empiezo el año donde Europa termina.

Mis padres me quieren, mi madre me comprende y respeta. Acabo de tener una linda conversación con ella, en la que ha adquirido la promesa de leer a Benedetti. Mi madre me educa, yo educo a mi madre. Gracias mamá por confiar en mí, antes y ahora. Mi madre enamoradísima de mi padre, aún hoy, se le nota, se ve en sus ojos. ¡Qué orgullosa estoy de estos dos chicos! ¡Qué afortunada de formar parte de este amor tan grande!


Y cuando todos estén dormidos, bailaremos.

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