La punta de mi lengua

Lo dejé marchar y no me arrastró.

Para usarlos, cuando los tuyos estén cansado

Y quizás en las nubes densas encuentres mi reflejo motivado por una imagen. Ese cuadro del que sólo tú eres consciente y sabes que yo descubriría con los mismo ojos.
Porque aunque nos separan muchas cosas, entre ellas la forma de amar, también latía en nosotros la misma curiosidad.
Ese día, cuando insistas en buscarme y no encuentres mi contorno, te darás cuenta de que me arrancaste los ojos.

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