La punta de mi lengua: no soy docil, no lo quiero
La punta de mi lengua
Lo dejé marchar y no me arrastró.
tristes aprendizajes
Me apeno a veces cuando veo que la gente a la admiré, en otro tiempo, se va apagando...
Acostumbrarse es comenzar a morir.
Y las personas en el fondo sólo quieren acostumbrarse.
Sólo quedan dos días para desaparecer de nuevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario